Para llevar a cabo las actividades de la vida cotidiana nuestro cuerpo se mantiene en un modo que es propicio para la acción, el cual nos permite desplazarnos de un lado al otro, resolver problemas, subir, bajar, correr, cargar objetos, etc.

Si bien este estado es totalmente necesario y adecuado para solventar nuestras ocupaciones, en muchas ocasiones el cuerpo se queda “bloqueado” en un estado de alerta, que se manifiesta en excesiva tensión corporal y dificultad para conectar con la relajación y el descanso.

En este taller aprenderás técnicas sencillas que puedes utilizar para bajar el ritmo del día a día y así entrar a un estado de mayor calma.

Abierto a todo público con cualquier nivel de experiencia.